Enchanted (The accidental billionaires 4) - J.S. Scott
Hace años, Noah Sinclair le prometió a su madre moribunda que se mantendría fuerte y trabajaría duro para sus hermanos y hermanas menores. Incluso con la nueva riqueza de los Sinclair, Noah nunca se ha alejado de esa campaña de obreros. Sus hermanos creen que ha llegado el momento, con el regalo de unas vacaciones en Cancún. Para Noah, verse obligado a relajarse no es una bendición. Es una faena. Especialmente bajo la supervisión de un hermoso amigo de la familia alistado para asegurarse de que todas las computadoras portátiles bajo el sol permanezcan cerradas.
Todo lo que Andie tiene que hacer es convencer a un apuesto multimillonario de que respire hondo. Debería ser un sueño para la bohemia escritora de viajes . Si Noah, un caballo de batalla tan resistente al cambio, no estuviera ansioso por una pelea. Pero no importa lo mucho que Noah la aparte, Andie lo sigue empujando. Prometió que le enseñaría a Noah a abrazar todos los placeres de la vida. También es una promesa que se hizo a sí misma una vez.
Lo que comienza como una batalla de voluntades se convierte en una oportunidad para que Noah y Andie abran sus corazones y compartan sus miedos. Noche tras noche íntima. Es lo último que esperaban de Cancún y es lo que más necesitan. Incluso si no se supone que sea para siempre.
Todo lo que Andie tiene que hacer es convencer a un apuesto multimillonario de que respire hondo. Debería ser un sueño para la bohemia escritora de viajes . Si Noah, un caballo de batalla tan resistente al cambio, no estuviera ansioso por una pelea. Pero no importa lo mucho que Noah la aparte, Andie lo sigue empujando. Prometió que le enseñaría a Noah a abrazar todos los placeres de la vida. También es una promesa que se hizo a sí misma una vez.
Lo que comienza como una batalla de voluntades se convierte en una oportunidad para que Noah y Andie abran sus corazones y compartan sus miedos. Noche tras noche íntima. Es lo último que esperaban de Cancún y es lo que más necesitan. Incluso si no se supone que sea para siempre.
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