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Haría cualquier cosa por mi mejor amiga. Bueno. Casi cualquier cosa. Cuando me ruega que vaya a una escapada de fin de semana para poder relacionarme con su nuevo novio, no puedo decir que no, por mucho que lo desee. Después de todo, quién va a vigilar al tipo; es el estereotipo de jugador de fútbol profesional (énfasis en JUGADOR) y no le confío el corazón de mi amiga. ¿Y lo que es peor? Tiene el descaro de traer también a su mejor amigo soltero, Davis, al viaje. Davis es demasiado guapo, tan divertido e inteligente que no puede ser humano. Las abuelas, los bebés y los gatitos se enamoran de su sonrisa. De hecho, todo el mundo lo adora menos yo **Arruga los ojos** ¿Qué esconde? Me niego a creer en su actuación; en algún momento dejará de actuar como un buen chico y mostrará sus verdaderos colores: también es un jugador. Debe serlo. Ya conoces el dicho... Si parece demasiado bueno para ser verdad, probablemente lo sea. Mil gracias a SB!

“Paso por mucho”. Eso es lo que dijo la última chica con la que me acosté cuando me vio por primera vez sobria. Se rio, salió de mi penthouse y nunca más la volví a ver. No importa que sea un atleta profesional rico; lo que importaba era mi cara. La belleza puede ser superficial para algunos, pero yo sé cómo son las cosas. “Págame”. Eso es lo que dijo la última chica con la que hablé por teléfono cuando le hice una oferta que no pudo rechazar. Desesperada por vender un juego de tarjetas de béisbol raras, es inteligente y entretenida. Estoy instantáneamente flechado, pero no estoy listo para revelarme de ninguna manera. Gracias a Dios, no tiene idea de quién soy, ni de cómo me veo. Soy un atleta profesional, ¿qué tan difícil puede ser jugar el juego del amor? Mil gracias a SB!

“Paso por mucho”. Eso es lo que dijo la última chica con la que me acosté cuando me vio por primera vez sobria. Se rio, salió de mi penthouse y nunca más la volví a ver. No importa que sea un atleta profesional rico; lo que importaba era mi cara. La belleza puede ser superficial para algunos, pero yo sé cómo son las cosas. “Págame”. Eso es lo que dijo la última chica con la que hablé por teléfono cuando le hice una oferta que no pudo rechazar. Desesperada por vender un juego de tarjetas de béisbol raras, es inteligente y entretenida. Estoy instantáneamente flechado, pero no estoy listo para revelarme de ninguna manera. Gracias a Dios, no tiene idea de quién soy, ni de cómo me veo. Soy un atleta profesional, ¿qué tan difícil puede ser jugar el juego del amor? Mil gracias a SB!

Es fácil aceptar un desafío cuando piensas que es inofensivo... Ashley Dryden-Jones es el mejor jugador de rugby en el campo; cuando acepto un desafío, me arrepiento instantáneamente, no tenía forma de saber que era un caballero. Un deportista. Británico sin planes de quedarse en Estados Unidos. Me hace olvidarme de mí con sus moretones, barba incipiente, acento y todo. Me hace olvidar que no puedo meterme en la cama con él por las noches, o emborracharme y dejar de lado las precauciones por una vez en mi vida demasiado cautelosa. Porque es mi nuevo compañero de cuarto. Una apuesta estúpida conduce a una noche inolvidable... Cuando gano un viaje a Las Vegas, necesito un acompañante; él es la opción fornida, fuerte y responsable. Además, nunca he estado en ningún lugar y él lo ha hecho. Es el mejor amigo que no sabía que necesitaba. Ashley es uno de los buenos, pero estoy a punto de descubrir lo malo que puede ser este chico bueno. Mil gracias a BZ & PB!

Comer. Dormir. Fútbol. Esos son los tres mantras de Jackson Jennings Jr. Ha sido un atleta entrenado toda su vida con un solo juego final: ser profesional. Sin chicas. Sin fiestas. Sin alcohol. Comer. Dormir. Fútbol. Repetir. Todos los viernes por la noche, Triple J recorre la avenida principal del campus, aburrido, solo y condicionado para no ir de fiesta. Pero la noche que conoce a Charlotte Edmonds al costado de la carretera, se pregunta si sus tres mantras alguna vez serán suficientes. Grandísimo. Atleta. Tonto. Charlie no tiene tiempo para las payasadas de Jackson. No cuando él le está robando la comida o se burla de ella sin fin, haciéndola sentir un hormigueo en todos los lugares correctos. Pero si alguna vez va a tener novio, elegiría uno que no sea un neandertal. Uno con modales y tiempo real para pasar con ella. No un inmaduro corpulento que recorre la avenida principal de noche, en su Grandísima. Camioneta. Tonta. Mil gracias a BZ & PB!

Piper ha estado enamorada de Ryder Williams durante años. ¿Qué mejor oportunidad para hacer algo al respecto que cuando él se sacrifica en una subasta por una multitud de fanáticas en un evento de caridad? Lástima que preferiría esconderse en el baño que levantar su pala. ¿En realidad qué chica puja por un chico que no sabe que existe? No Piper. Pero para eso están las amigas... Una mejor amiga entrometida y una puja demasiado alta después, y Ryder Willams está a merced de Piper. Lástima que no tenga intención de cobrar su deuda. Lástima que Ryder está decidido a averiguar por qué. Mil gracias a BZ & PB!

Scarlett es siempre la sensata. La conductora sobria. La planificadora. La que te retiene el cabello mientras adoras a los dioses de porcelana. Semana tras semana visita Jock Row con sus amigas: la escena de fiesta más popular de la universidad y caldo de cultivo para estudiantes atletas. Y si mantener a sus amigas fuera de problemas y a los chicos fuera de sus pantalones fuera un deporte, ella sería la atleta estrella. El ser una Corta Rollos reconocida la hace notar por todas las razones equivocadas; y solo así, es vetada en Jock Row. Ningún tipo quiere una chica alrededor que evita que sus amigos deportistas echen un polvo.  “Rowdy” Wade es el mejor campocorto del equipo de béisbol de la universidad, y el bastardo desafortunado que sacó la pajita más corta: le toca mantener a la Señorita Santurrona fuera de la Casa del Béisbol. Pero Scarlett regresa semana tras semana, decidida a entrar. Mil gracias a BZ & PB!

Todos dicen que Rex Gunderson no es material para ser novio, que no es lo suficientemente serio, que es un chiste.  Se rumorea que el desgraciado ex mánager del equipo de lucha dejó el campus con la cola entre las patas. Pero ahora Rex ha vuelto, no está ni cerca del idiota que solía ser y está listo para demostrar que todos están equivocados. El leopardo ha cambiado sus manchas, y está a punto de convertirse en mi entrenador de citas. Mil gracias a SB!